Siete explosiones en Colombo, capital de Sri Lanka, y en sus proximidades han causado la muerte de 200 personas y 400 heridos este Domingo de Resurrección, según fuentes policiales.


 

Las detonaciones han sido en cuatro hoteles turísticos de lujo: el Cinnamon Grand, el Kingsbury, el Shangri-La y en uno próximo al National Zoological Gardens de Colombo, y en tres iglesias, dos católicas y una protestante: la iglesia San Antonio de Colombo, la iglesia San Sebastián de Negombo, al norte de la capital, y en una iglesia de Batticaloa, en el este de la isla. Hasta el momento ningún grupo ha reivindicado los atentados.

Los ataques comenzaron a las 8:45 de la mañana y se fueron sucediendo con el paso de los minutos. Las autoridades del país mantienen hasta el momento una reunión de emergencia y darán un comunicado en las próximas horas. Harsha de Silva , ministro para las Reformas Económicas y la Distribución Pública, ha manifestado su conmoción ante las “horribles escenas” que se están viendo en el país y ha pedido precaución con la difusión de vídeos e imágenes sensibles, así como de fake news. El presidente de Sri Lanka, Maithripala Sirisena, ha declarado el toque de queda a partir de las 18:00 de la tarde hasta las 6 de la mañana.

 

 

Además, la masacre coordinada contra una de las minorías religiosas del país, tiene lugar el día más importante de la Semana Santa para los cristianos y donde los feligreses habían acudido a los lugares santos para celebrar la Pascua.

Sri Lanka es un país con 21 millones de habitantes de los cuales el 70% son budistas, el 10% musulmanes, el 12% hinduistas y un 7% cristianos (1,2 millones de católicos). Los cristianos, a pesar de ser una minoría, han sido siempre vistos en el país como una religión unificadora ya que acoge tanto a cingaleses como a tamiles, etnias enfrentadas a lo largo de la historia en el país.

 

 

Líderes mundiales condenan el ataque

Varios líderes mundiales han condenado la masacre perpetrada contra turistas y cristianos en Sri Lanka esta mañana de Pascua. Entre los muertos hay 35 extranjeros, según fuentes del hospital de Colombo, entre los que se encuentran estadounidenses, británicos y holandeses entre otras nacionalidades.

El primer ministro de la India, Narendra Modi, ha lamentado los ataques a través de Twitter. “No hay lugar para tal barbarismo en nuestra región. La India se solidariza con el pueblo de Sri Lanka. Mis pensamientos están con las familias afectadas y las oraciones con los heridos», publicó.

 

 

La canciller alemana, Angela Merkel, también se ha manifestado a través de la red social: “Estamos horrorizados por la noticia sobre los cristianos en Sri Lanka”, «Los lloramos y oramos por los heridos y sus familiares».

Por otra parte, el islamista y máxima autoridad turca, Recep Tayyip Erdogan, ha lamentado la cadena de atentados en la isla. “Es un asalto a toda la humanidad».

El Papa Francisco, durante la misa de este domingo por la Vigilia de Pascua en la Plaza de San Pedro del Vaticano, ha expresado su “dolor y tristeza” tras la tragedia. El Sumo Pontífice ha asegurado estar de luto por la comunidad cristiana de Sri Lanka y ha mostrado su apoyo a las familias afectadas por los “atroces atentados” de esta mañana.

A pesar de algunas confrontaciones aisladas entre musulmanes y budistas en el país durante 2018, Sri Lanka llevaba 10 años sin violencia tras la derrota en 2009 del grupo separatista los Tigres Tamiles. También había comenzado a recuperar el turismo, tan importante para la isla.